«Podemos imaginarlo todo, predecirlo todo, salvo hasta a dónde podemos hundirnos»
Émile Michel Cioran
La primera y mayor cryptomoneda del mundo por capitalización de mercado, el Bitcoin, se le considera la primera implementación a gran escala de la tecnología de la cadena de bloques (blockchain). La cadena de bloques de Bitcoin fue diseñada para permitir transacciones rápidas y seguras, y a a vez mantener el anonimato de los usuarios utilizando un libro de registro público que autentifica las transacciones.
Desde su creación en 2009 por el desconocido Satoshi Nakamoto, el Bitcoin ha liderado la industria de las cryptomonedas. Evoluciono desde ser la única cryptomoneda del mundo a la más utilizada entre más de un centenar de ellas a día de hoy.
Conviene subrayar que desde principio de noviembre de 2019 hasta hoy, es decir, las últimas 3 semanas, el valor de esta cryptomoneda ha bajado de 9.000 a 7.200 dólares y actualmente mantiene una tendencia negativa. Aunque realmente estos datos no son concluyentes, pues cuando hablamos de la Bolsa donde es común ver valores cambiar mucho de un día para otro y aún más si estamos hablando de cryptomonedas (CFD), que es un mercado especialmente volátil por la inestabilidad y desconfianza que producen entre los inversores más veteranos. Si las cryptomonedas generan este nivel de desconfianza es porque son una figura relativamente nueva que ha ganado mucha popularidad y es considerada por muchos traders como una moda pasajera. El mercado del Bitcoin es denominado como el de un producto intangible e irreal que solo «engatusa» a los principiantes que se meten en bolsa con demasiado inpetu y codicia.
(Gráfica de http://www.tradingview.com), marzo de 2018
En su día hubo varios gurú del trading, concretamente los mas abiertos a las nuevas tecnologías y más optimistas con el nuevo mundo que se abre con los blockchain y las crypto, que creyeron que para la siguiente recesión económica el Bitcoin podría llegar ha reemplazar al oro como método de salvaguardar él patrimonio, pues el oro nunca podría valer cero ya que es la Alma Mater de todas las monedas físicas. De la misma manera que en el mundo hay una cantidad limitada de oro, existe un techo dentro de la cantidad de Bitcoins que pueden ser creados, siendo 21 millones la cantidad máxima que puede haber en circulación.
Personalmente veo con interés lo que pueda pasar con el Bitcoin, pues es algo nuevo y es cierto que si evoluciona de forma positiva podría hacer que la sociedad en su conjunto se replanteara la sostenibilidad del sistema bancario tal y como ahora lo conocemos. Los más fervorosos defensores del Bitcoin sostienen que el modelo que se abre con las cryptomonedas es el de la descentralización del dinero que se pueda ganar. La descentralización tendría que ir acompañada de un apoyo social muy amplio para que realmente las masas populares se lo planteasen como una opción real a tener en cuenta frente a las entidades bancarias. Ante el exceso de optimismo de los «visionarios» de las crypto yo me muestro escéptico, a pesar de que no tengo una opinión muy clara al respecto, pues de la misma forma que en 2017 el Bitcoin tuvo una subida impresionante y muchos inversores ganaron dinero, cuando caiga, si cae, también lo perderán.
«Alea iacta est«
Julio César
Bibliografía:
https://www.europapress.es/temas/bitcoin/
https://es.tradingview.com/symbols/BTCEUR/
https://www.ferratum.es/blog/criptomonedas-bitcoin-5-alternativas
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